Los enamoramientos, de Javier Marías
28.1.14La última vez que vi a Miguel Desvern o Deverne fue también la última que lo vio su mujer, Luisa, lo cual no dejó de ser extraño y quizá injusto, ya que ella era eso, su mujer, y yo era en cambio una desconocida y jamás había cruzado con él una palabra. Ni siquiera sabía su nombre, lo supe sólo cuando ya era tarde, cuando apareció su foto en el periódico, apuñalado y medio descamisado y a punto de convertirse en un muerto, si es que no lo era ya para su propia conciencia ausente que nunca volvió a presentarse: lo último de lo que se debió de dar cuenta fue de que lo acuchillaban por confusión y sin causa, es decir, imbécilmente, y además una y otra vez, sin salvación, no una sola, con voluntad de suprimirlo del mundo y echarlo sin dilación de la tierra, allí y entonces. Tarde para qué, me pregunto. La verdad es que lo ignoro. Es sólo que cuando alguien muere, pensamos que ya se ha hecho tarde para cualquier cosa, para todo —más aún para esperarlo—, y nos limitamos a darlo de baja.
Desde que se publicó este libro que lo quiero leer. Llamadme superficial pero tanto el título como la portada me llamaban mucho la atención. De hecho pensé que si algún día publicaba un libro me gustaría una portada como la de este libro. También quería estrenarme con un maestro de las letras como el autor de este libro. Por eso cuando me hice de Círculo de lectores aproveché el regalo inicial que te hacen (¡dos libros a tres euros cada uno!) para hacerme con él. Hoy os traigo Los enamoramientos, de Javier Marías.
Este es uno de esos libros que no se puede revelar de qué va pues, si lo hiciera, reduciría en mucho la magia de su lectura. Por eso solamente contaré el punto de partida. La protagonista y narradora de la historia cuando va a tomarse un café antes de entrar a la editorial en la que trabaja se fija en una pareja ideal con la que cada mañana coincide. Le asombra la naturaleza y el amor que emanan de todos sus gestos y sus miradas. Se imagina como deben ser sus vidas observándolos cada mañana, cuales deben ser sus preocupaciones y cuales son sus alegrías.
Detrás de este sensacional título y esta fabulosa portada se esconde una historia delicada dividida en tres partes que debe leerse a fuego lento. Es la primera vez que Javier Marías se atreve a meterse en la piel de una mujer y a muchos seguidores del escritor no les acaba de convencer el cambio. Los diálogos escasean y los pocos que hay se confunden con las extensas reflexiones y pensamientos que dan vueltas a la existencia, el amor y las relaciones entre las personas. Los lectores que busquen acción no pasarán de la décima página de este libro. Las frases se alargan indefinidamente adquiriendo forma de pensamiento íntimo y personal que envolverá desde la primera página al lector.
Si bien es cierto que me ha encantado el estilo de Javier Marías también lo es el hecho de que este libro lo he dejado y retomado dos veces. A pesar de que disfrutaba muchísimo con la historia y las reflexiones que se derivaban de ella, no es un libro corto y la densidad de sus páginas puede llegar a cargar demasiado al lector, que a veces necesita un poco de acción. A la mínima que notaba que perdía constantemente el hilo dejaba el libro, cogía otro más ligero y volvía a este unas semanas después, con el recuerdo imborrable de lo que llevaba de historia en la cabeza. Recomiendo a todo el que se atreva con este libro a que, si en algún momento se le empieza a hacer farragosa la lectura, la deje un par de semanas y vuelva a él, pues esta obra maestra solo merece ser leída hasta el final si se saborea cada una de sus páginas. Uno de los mejores momentos es el principio, aunque por toda la novela hay instantes en los que los intensos sentimientos de los protagonistas, que indagan en el sentimiento del amor, reconociendo sus límites y sus efectos sobre las personas.
Lo único que me me ha fallado un poco ha sido la protagonista. Me ha parecido una mujer que acepta las circunstancias tal y como se le presentan, simplemente se deja llevar. Siempre acepta las condiciones que se le imponen y no exige nada a nadie, ocupando una situación de testigo, más que de protagonista. De hecho en el libro la llaman la joven prudente. He echado de menos que intervenga más en el devenir de los hechos y exija a los demás personajes.
En conclusión, sin duda Los enamoramientos ha sido de las mejores y más complejas lecturas de este 2013 finalizado. Un libro sin acción pero plagada de reflexiones que giran alrededor del amor. La historia no tiene pérdida y, aunque a veces se puede hacer un tanto denso, vale la pena enfrentarse a sus páginas. Mientras lo leía me sentía desnudo, como si Javier Marías indagara por aquellos sentimientos más íntimos míos -como buen hombre enamorado que soy- y otros que nunca los había sentido pero los sentí mientras leía este libro. A todos aquellos que os apetezca una lectura para reflexionar, lenta y exigente, este es vuestro libro.
¿Y vosotros con qué libro habéis tenido esta sensación de desnudez?
24 comentarios
no he leído nada del autor, pero hablas con tal entusiasmo del libro, que me esta entrando curiosidad...
ResponderEliminarUy, uy, pues no me convences y eso que le tenía ganas. Si dejo un libro por su densisad y tengo que retomarlo después, no lo clasificaría entre las mejores lecturas. ¿Y a hora qué hago? Saludos
ResponderEliminarDe Marías solo leí un libro de no ficción, así que aún estoy por estrenarme en sus novelas. Esta parece una buena opción, te haré caso.
ResponderEliminarUn abrazote.
És l'únic que he llegit de l'autor i em va agradar força. Un llibre a estones exigent però que sedueix, al igual qiue la portada.
ResponderEliminarEste libro lo tengo en la estantería, a la espera del "momento" me lo regalaron junto con un juego de postales preciosas (incluida la de la portada y citas en el revés de obras de Marias) yo tampoco he leído nada previamente pero estoy desando probar con este. anoto bien tus impresiones y recomendaciones para la lectura. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarUn beso
No termina de llamarme, y eso que al principio me parecía súper interesante. De momento lo dejo.
ResponderEliminarBesos.
A mi este libro me resultó muy pesada y no terminé de encontrarle el encanto ni a los personajes ni a la historia.
ResponderEliminarUn saludo.
Una amiga lo tiene y me lo ha recomendado y lo tengo anotadísimo, tengo muchas ganas de leerlo y no tardaré en hacerlo ;D
ResponderEliminarHe de admitir que lo dejé a medias, y eso que no me estaba desagradando, pero entre las clases, los exámenes y tal... lo dejé y no volví a retomarlo. Lo tengo pendiente.
ResponderEliminarBesos:)
Creo que este libro me resultaría un poco pesado, me cuesta leer libros tan reflexivos.
ResponderEliminarGracias por la reseña :)
Lo leí hace un tiempo y francamente me pareció muy aburrido. No me gustó nada. Lo compré porque, con ese título, pensé que me encontraría con otro tipo de historia, no rosa, pero sí más amena y me costó la vida terminarlo. Besos.
ResponderEliminarNo termina de convencerme, eso de que tuvieras que dejarlo y retomarlo no me huele bien. Besos.
ResponderEliminarTengo este libro en casa y la principal razón por la cual no lo he leído es que lo ha hecho mi madre y me dijo que el libro no le gustó lo más mínimo. Se le hizo lento y le costó horrores terminarlo, lo hizo a disgusto y bueno, te puedes hacer una idea de que el libro no la entusiasmó demasiado. Entonces, sumado a que no es un tipo de lectura que vaya mucho conmigo no le he dado siquiera una oportunidad.
ResponderEliminarY es que tampoco tengo ningún problema con los libros densos, es más, me gustan y los disfruto mucho, pero nuevamente volvemos al tema que trata y ahí ya si que no estaría tan dispuesta a leer algo más denso.
A lo mejor es una lectura que, en otro momento de mi vida, tal vez disfrute mucho, pero de momento creo que seguirá en la estantería.
Besos
me lo apunto porque me encanto tu recomendacion
ResponderEliminarMe llama y me impone a la vez, son varios los que me han comentado eso de la densidad y que lo habñian abandonado (algunos no lo retomaron), y ahí sigo, no sé qué hacer. Un beso!
ResponderEliminarCon este autor me animé hace años. Leí varias obras suyas seguidas y me gustaron, pero terminé cansándome un poquito, lo reconozco. Así que ahora que estoy bien descansada de su estilo, quizás me anime con éste, que me has tentado con tu reseña.
ResponderEliminarBesotes!!!
No me llama mucho la atención pero esos son siempre los que mas me gustan XD.
ResponderEliminarSaludos!!
Tenía ganas de leer este libro, que fue elegido por El País la mejor novela de 2011, si no me equivoco... Pero luego empecé a ver opiniones en las que incidían en la densidad de este libro, lo que hizo detener mis ganas: no es que no me gusten los libros densos, pero creo que necesitan ser leídos en un momento concreto en el que no me encuentro ahora. Lo tengo en cuenta para cuando me apetezca un poco de exigencia literaria; creo que, entonces, me llevaré una gran alegría con esta obra. 1beso!
ResponderEliminarPor un lado tengo ganas de leerlo pero por otro lado me impone un poco el estilo del escritor y lo que cuentas que se hace denso en algunas partes. Un beso
ResponderEliminarNunca había oído nada del libro, pero me ha gustado tú reseña, me lo apunto en mi interminable lista de pendientes.
ResponderEliminar¡Besos!
Este lo tengo pendiente por casa, que llevo para leerlo un montón de tiempo =)
ResponderEliminarBesotes
Me llama mucho la atención. Me lo apunto.
ResponderEliminarUn beso
por como lo presentas parece interesante, no creo que haya muchos libros que sean capaces de desnudarnos, si este lo logró seguramente vale la pena leerlo, gracias por la recomendación, saludos.
ResponderEliminarNo es que necesite acción, es que necesito que me cuenten algo y Marías no lo hace ni de lejos en este libro. Las reflexiones me parecen aburridas y sin sentido, de tanto repetir lo mismo con distintas palabras. A mí me encantan las reflexiones y los libros que giran en torno a una idea, pero por dios! Es como describir un lápiz y como se fabrica de diez maneras distintas..
ResponderEliminarA mí también me llamó la atención la portada y el título.. pero no creo que vuelva a probar a Marías.
saludos!