El quinto en discordia, de Robertson Davies

23.1.16



"Mi relación con la señora Dempster, que duraría toda la vida, empezó exactamente a las 5:58 de la tarde del 27 de diciembre de 1908, momento en el cual yo contaba diez años y siete meses de edad.
Puedo citar la hora con absoluta certeza porque aquella tarde había estado montando en trineo con mi amigo y enemigo de toda la vida, Percy Boyd Staunton, y nos habíamos peleado porque su nuevo trineo, que le habían regalado en Navidad, no era tan rápido como el mío, ya viejo. Nunca nevaba demasiado en nuestra esquina del mundo, pero aquella Navidad había nevado tanto que las briznas más altas de la hierba seca de los campos habían quedado prácticamente cubiertas. En tales circunstancias, su trineo, con altos patines y un estúpido dispositivo para manejar la dirección, resultaba torpe y propenso a engancharse; en cambio, mi viejo y bajo trasto casi habría podido deslizarse por la hierba sin nieve alguna."


Cuando el lector abre las páginas de este libro, antes de empezar con la novela propiamente, se encuentra con la definición de la expresión que le da título. "Dícese de aquellos personajes que sin ser el héroe o la heroína, pero tampoco el confidente o el villano, son igualmente importantes para el desenlace de la trama". Detrás del tono oficial y formal que conlleva una definición, vi en esta página una especie de aviso, una advertencia, un prefacio que se mantendría insondable hasta el final de una historia que ni siquiera había empezado.

En el crepúsculo de su vida, un Dunstan Ramsay anciano le escribe al director del centro académico en el que ha sido profesor de Historia durante más de cuarenta años. Dunstan está absolutamente indignado y molesto por el artículo que se le dedica a su jubilación en el diario del centro, en el que se resume su vida con los cargos de la institución que ha ocupado a lo largo de los últimos años. Así pues, decide relatar su vida al director para demostrarle que su vida no ha sido tan anodina y gris como da a entender el artículo.

Dunstan y Percy Boyd Staunton, dos niños de diez años, aprovechan la excepcional nevada que ha teñido de blanco todas las calles del pequeño pueblo canadiense de Deptford para jugar con sus trineos. Pese a que el trineo de Percy es caro y nuevo, nunca consigue igualar en rapidez al viejo, ajado y zarrapastroso trineo de Dustan. Mientras esta guerra infantil tiene lugar, pasan por ahí la embarazada señora Dempster y su marido, el reverendo Amasa Dempster. Percy, de familia adinerada y algo mimado, tiene muy mal perder, cosa que lo lleva a lanzar una bola de nieve a su adversario. Dustan, ágil, esquiva el proyectil helado, que alcanza la cabeza de la señora Dempster, que cae al suelo gritando del dolor. Al cabo de unas horas se le adelanta el parto y nace Paul Dempster.

A veces la intuición acierta, pero muchas otras veces nos engaña. Adquirí este libro más por la efusiva recomendación de mi librera que porque me llamara la atención desde un principio. Nunca había leído nada de Libros del Asteroide. Nunca había leído nada de Robertson Davies. Y, si no fuera por la confianza que le tengo a Fe, en ese momento no me hallaba en ánimos de meterme en una trilogía. Pero, por suerte y gracias a ella, lo hice y tuve la ocasión de leer una de las mejores novelas que he leído en este ya pasado 2015. Cuando uno lleva altas expectativas de un libro y le convence una vez leído es bueno, pero cuando uno empieza un libro sin tenerlas todas y una vez leído le encanta es una deleitosa sorpresa. Esto es lo que me ha pasado con El quinto en discordia.

Siempre digo que las novelas que más me gustan son las "de personajes". Las que se dedican a intentar entender la complejidad de las recónditas almas de sus protagonistas. Esta novela, sin duda, es de este tipo. A través de Dunstan Ramsay intentamos comprender el desdén, la frialdad y el egoísmo de Staunton, el desapego de Paul y, para mí el personaje desarrollado con más ambición por parte del autor, la misteriosa señora Dempster.

Además, más allá de lo que Robertson Davies escribe, está lo que Robertson Davies no escribe, es decir, el protagonista. Al ser Dunstan Ramsay el narrador en primera persona de la historia y teniendo en cuenta su personalidad es fácil que quede difuminado. Dunstan Ramsay, quien crece culpándose por esquivar aquella bola de nieve, hace depender su felicidad a la felicidad de los demás. Así, solitario por naturaleza, no es afortunado ni en el amor ni en el dinero y, para llenar el vacío que lleva en su interior y olvidar su culpa se alista para luchar a la Primera Guerra Mundial, se entrega a la hegiografía, se obsesiona con la señora Dempster y, más tarde, con su hijo Paul y Staunton. Sigue esas vidas ajenas con fervor y hace depender su felicidad a la de ellos. Es el quinto en discordia.

Aunque el relato se centra indudablemente en sus personajes que, por destino o azar, se pierden y se reencuentran constantemente, el escenario tampoco puede ser mejor. A través de la narración de Dunstan se puede percibir cómo cambia la sociedad canadiense con su participación en la Primera Guerra Mundial, y cómo cambia la vida de los jóvenes ciudadanos que cruzaron el charco para ayudar a sus aliados del Viejo Continente.

Robertson Davies es de estos pocos escritores que hacen que se aprecie sencillo algo que es complicado. Narra la historia de una forma fluida y natural, como si se hubiera puesto ante la máquina de escribir y, convirtiéndose en Dunstan, relatara su vida sin necesidad de revisión o correcciones. Un estilo nada recargado, fácil de leer, hipnótico, sin ningún elemento forzado, sin grandes cavilaciones, sino imprevisible, intenso y con la serenidad que otorga el paso del tiempo.

El quinto en discordia me ha gustado y mucho. No tengo ninguna frase subrayada en lápiz, no tiene ninguna página que deje al lector con la boca abierta por la elocuencia que demuestra el autor. Sin embargo, estilísticamente es redondo, y lo mejor de la novela son los inolvidables personajes que te deja. Una historia potente que engancha y no deja indiferente al lector. Muy recomendable.

El quinto en discordia es la primera parte de la trilogía de Deptford, a la cual sigue Mantícora -se centra en Staunton-, y El mundo de los prodigios -se centra en Paul Dempster-. Y sí, un servidor no tardará en volver a Deptford.




RINCÓN DEL LECTOR INDIGNADO
Hoy dedicado a: el impresentable que escribe las sinopsis de Libros del Asteroide.

¡Sí, TÚ, infame! ¡Dime! ¿POR QUÉ?? ¿Por qué nos haces esto? Tu maldito trabajo es escribir la sinopsis en la contraportada del libro, ¡no revelar el giro inesperado final! ¡Que alguien se lo diga! ¿Pero cómo se le ocurrió revelar ESO en la contraportada? 

Lo primero que uno hace cuando tiene un libro en la mano es leer su sinopsis, y así lo hice yo, ¡inocente de mí! Pero a medida que iba leyendo el libro me daba cuenta de la dimensión real del pedazo de spoiler que contiene la PRIMERA MALDITA FRASE del texto en la contraportada. Por favor, Libros del Asteroide, POR-FA-VOR, esta es una urgencia editorial: cambiad la contraportada para la siguiente edición. 

Querido lector, si te has animado a leer esta excelente novela, te aconsejo que evites leer la contraportada. Sé que es difícil, es lo primero que uno lee, e incluso yo, durante las pausas de lectura, muchas veces le echo un vistazo. Pero es que no logro entender cómo se atrevieron a poner eso en la sinopsis.


20 comentarios

  1. Hola! Gracias por tu reseña, tendré en cuenta esta novela. Qué pena lo de la contraportada...
    Besos.

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  2. Hooooola, oh, ¡cuánto me alegro! A mí tampoco me suena el título, para nada. :O
    [ Siempre digo que las novelas que más me gustan son las "de personajes". Las que se dedican a intentar entender la complejidad de las las recónditas almas de sus protagonistas. ] Vaya, ¡ya somos dos! Me siento comprendida. Así que debo apuntármelo. Cabe decir que ME HA ENCANTADO LA PARTE FINAL DE TU ENTRADA. Casi me muerdo de risa, en serio. JAJAJAJAJA Gracias por avisarnos. ;) Yo, por ejemplo, no leo las introducciones de los libros. Siempre acaban contando algo que no debo saber, ¡y es que parecen no darse cuenta del daño que hacen! Así que me he acostumbrado a leer una introducción de un libro después de leer la historia que contiene. ^___^
    Un beso!

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  3. Hola :)
    Me ha encantado el rincón del lector indignado, es genial xD
    No lo conocía y aunque no se mira nada mal, por el momento tengo demasiados pendientes, gracias por la reseña ^^
    Besoss

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  4. No sé que disfruto más... si con tu reseña, que me ha gustado mucho
    con que porfin pongas estrellitas
    o con el rincón del lector indignado con gif incluido...
    estoy maravillada x)
    pues nada, igual me animo y todo a leerlo, porque no me sonaba de NA (qué raro eh)
    un beesito

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  5. No me importaría leerlo, no lo conocía =)

    Besotes

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  6. apuntado pero como se les ocurre xXDDDDDDDD a evces es como las ediciones de anagrama que cuentan mucho del libro!

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  7. ¡Qué envidia me das!: tener una librera que te haga tan buenas recomendaciones

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  8. Tengo la trilogía en casa, la compré en Círculo de lectores y venía en un solo volumen con un aire vintage chulísimo. He leído este que nos traes, el primero, y me pareció muy bien escrito, a ver si continúo. Besos.

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  9. No lo conocía, solo he leído un libro de la editorial, pero la verdad es que me gustó mucho, así que entre tu reseña y que en general parecen editar buenos títulos, creo que me lo llevo anotado.
    Cada vez hay que tener más cuidado con las sinopsis, pero por lo que cuentas lo de esta es un despropósito..
    Besos

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  10. Pues tiene muy buena pinta y no lo conocía, a ver que te parece el retso que al ser trilogía me espero.
    Un beso!

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  11. ¡Hola!
    No pinta mal para mi gusto, así que es posible que termine leyéndolo.
    Gracias por tan fantástica reseña.
    ¡Nos leemos! :-)

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  12. Me he reído con tu apostilla sobre las sinopsis, me ha pasado unas cuantas veces y es algo que odio. No entiendo cómo no ponen más cudiado.
    En cuanto al libro que traes, la verdad es que no termino de d3ecidirme
    Besos

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  13. Me ha convencido tu artículo, voy a darle una oportunidad al libro.
    ¡Un saludo!

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  14. Que guay es la sensación que deja un libro del que no esperabas al sorprenderte de esa manera. Me ha llamado mucho la atención todo lo que has contado. Yo también soy de libros "de personajes". Creo que no voy a tardar mucho en leerlo, ya te contaré.
    Y madre mía, gracias por avisar de lo de la sinopsis. A veces hacen cada cosa... Un abrazo, Jan.

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  15. ¡Hola!
    Otro bloguer me habló muy bien de Davies y por eso tengo apuntado su libro "A merced de la tempestad". Y ahora iré a apuntar este otro.
    Me fío de tu criterio, porque Neus también lo hace ;)
    Además, este tipo de libros, "de personajes", también suelen gustarme y mucho. Y tampoco yo entiendo a qué vienen esas sinopsis que más que introducirte vienen a destriparte gran parte de la historia si es que no lo hacen totalmente.
    Un beso :)

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  16. Gracias por el aviso!!De echo,desde ahora no leeré nunca mas las contraportadas de los libros,por si las moscas.Jajaja.Me ha encantado tu reseña.Te sigo desde ahora.
    Besos!

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  17. Pues me lo llevo apuntadísimo, gracias por la recomendación. Por cierto, me quedo por aquí, ¿nos leemos?
    Saludos :D

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  18. Qué bueno lo de la contraportada, pensé exactamente lo mismo, pero por suerte (creo que estoy cogiendo la costumbre de jamás leer contraportadas) no lo leí hasta el final. Como dices, es incomprensible que cuenten lo que cuentan. Obviamente, el libro vale mucho más que eso, pero ¿qué necesidad hay de reventar una de las posibles sorpresas?

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